¿Qué es lo que necesita un país para desarrollarse: ingenieros o revolucionarios? Eso siempre depende de lo que se pretenda, de lo que se defienda y de quien lo haga. La historia habla por sí sola, pero en la Cuba de ahora, hieden los razonamientos.“_¡Escúchame bien, nosotros no formamos ingenieros, porque Cuba no necesita ingenieros, nosotros formamos revolucionarios que es lo que el país necesita! Esto es una escuela de revolucionarios y para revolucionarios, tu actitud no se corresponde con nuestros propósitos y eso compromete seriamente tu estancia en este centro”
El imperativo era de una autoridad docente. El motivo de tal, correspondía a un estudiante de primer año que por razones de conciencia se había negado a desfilar el 1 de mayo con el resto de sus compañeros. Para ser justo no era el único que no había asistido al acto, pero sí el primero que exponía de manera clara los motivos por los cuales no asistiría. ¡Y fue una bomba!
Su argumento era razonable: "el desfile por el 1 de Mayo en Cuba ha perdido su esencia obrera y proletaria. Se ha convertido en un instrumento propagandístico del gobierno". ¿Cabe duda de eso? Tal argumento habría funcionado con personas razonables, pero en un Sistema como el cubano aquello apestaba a herejía. Era demasiado sensato y demasiado cierto.
La ortodoxia revolucionaria no soporta estos razonamientos matemáticos; por frívolos. Sin esas voluptuosas y falsas "emociones revolucionarias", la nota suena proimperialista. No; definitivamente alguien que piensa con tal lógica jamás será un "revolucionario". Un revolucionario de verdad es realista: acepta lo imposible.